martes, 30 de agosto de 2011

Escitalopram, Noctamid y otras hierbas.

En verano, suelo releer libros que me han gustado, suelo sentarme en unos bancos que hay cerca de mi casa, cobijandome a la sombra de un sauce llorón, un arbol precioso. De vez en cuando levanto la vista y me quedo mirando a la gente, unos pasean a sus perros, otros a sus hijos y otros pasean a sus parejas, me fijo y no tiene expresión alguna, me recuerdan a esas peliculas del siglo pasado de miedo, en la que los zombies campaban a sus anchas y pienso, yo tambien soy asi. Me doy cuenta de que vivo en un pueblo de a lo sumo diez mil habitantes, en el que antes vivian unas siete mil personas y claro, más o menos nos conociamos, salvo honrosas ocasiones. Joan el charcutero, Ángela la pollera, Jaume el frutero, Maria la panandera, Mª Rosa y su merceria, no se ... pero añoro esos tiempos, añoro el ir a la tienda y decir: Bon dia y todo el mundo te respondia, te llamaban por tu nombre y te preguntaban por la familia, pero no por chafardear si no porque les interesaba, echo de menos la vida como en Cuentame, mi hermano en la universidad trayendo panfletos en contra del regimen,  mi madre escuchando la Pirenaica y mi padre blasfemando en arameo por culpa del cura reaccionario del pueblo, yo sentada en al trona y mis padres escuchando Matilde Perico y Periquin y mi hermano leyendo Hazañas Belicas, Jabato o el Capitan Trueno.
Ahora mi vida es tres pastillas por la mañana y tres por la noche, eso si, si no me duele nada, si me duele algo me pego un lingotazo de paracetamol y cosa fina. 

1 comentario:

Anonymous dijo...

Es lo que tienen los pueblos, que por una parte son muy familiares pero por otra es un nido de víboras que viven de los cotilleos de las vidas de los demás.
En el fondo tampoco ha cambiado mucho el aspecto socio-cultural del país. Los pueblos siguen estando, los que no son pueblos se siguen comportando como tales, y en algunas casas siguen llegando panfletos contra regímenes, que aunque democráticos no por ello algunos dejan de ser totalitarios.